Una nueva temporada del deporte más hermoso del mundo empieza en
el viejo continente y vuelve a sonar el maravilloso himno de la UEFA Champions
League.
Todas las ligas europeas dieron inicio a sus actividades hace ya
un mes pero jugar un partido de liga en agosto es como un amistoso de verano,
no hay tonificación muscular ni un nivel de resistencia física óptimo. El
potencial de los clubes de élite en Europa es el más alto del planeta pero es
imposible pensar que puedan expresar un juego digno de dicho potencial sin
siquiera haber completado sus plantillas. Este es un tema que me resulta
importante aclarar porque es una de las principales columnas que sostienen el
sistema actual económico del fútbol mundial.
Los clubes en Europa tienen permiso para registrar nuevos
jugadores en el torneo de Liga durante la ventana fichajes que se abre el 1ro
de Julio y se cierra el último de Agosto. Si las Ligas terminan usualmente en
las primeras dos semanas de Mayo y los torneos de selecciones ocupan siempre el
mes de Junio, el tiempo de vacaciones que tienen los clubes es prácticamente
nulo. Como en cualquier empresa, los dirigentes deben planificar la estrategia
de producción de la nueva temporada con suficiente antelación para prevenir
inconvenientes, retrasos y controlar gastos. Con esa idea en la mente, podemos
hacer una analogía que encaja perfectamente en la dinámica de los clubes
profesionales.
La calidad de los jugadores junto con la del entrenador determinan
el potencial éxito deportivo en los torneos. Las victorias y los títulos
otorgan prestigio internacional así como también premios y oportunidad de
participar en mayores torneos y así obtener mayores premios. El éxito atrae
consigo la fama, que a su vez lleva la imagen del club a los ojos del todo el
planeta. Aquí entran los patrocinios de las empresas internacionales que pagan
millones por aprovechar la publicidad que generan dichos clubes exitosos.
Las cadenas televisoras son las que más dinero mueven en este
sentido pues son las que compran los derechos de transmisión de cada partido
donde participen estos clubes importantes. Con el dinero obtenido por los
derechos televisivos y los demás patrocinantes, los clubes pueden invertir en
nuevos jugadores que mejoren o mantengan el nivel competitivo del equipo,
mejorar las instalaciones del estadio para obtener mayores ingresos en
marketing y merchandising, o incluso fundar nuevas escuelas deportivas
juveniles en distintas partes del mundo que ayuden a propagar la imagen
positiva de la entidad y aumenten su popularidad, lo que se traduce en más
seguidores que pagarán más dinero dentro del mismo círculo económico. No es muy
complicado, ¿verdad?
En medio de todo el paquete, las federaciones de cada país, que
también reciben su parte del pastel, decidieron aumentar la cantidad de equipos
en primera división para aumentar así la cantidad de partidos por temporada, a
su vez aumentando la cantidad de dinero a recibir por derechos de transmisión,
incluso hasta modificando los horarios de dichos encuentros de manera que se
puedan transmitir siempre más en una misma jornada y, en el caso de la Premier
inglesa, al mejor horario para la teleaudiencia asiática, la más numerosa del
planeta. Con un calendario tan apretado hay partidos de alto nivel cada 3 días,
con vuelos internacionales y a veces incluso transcontinentales debido a las
selecciones, lo que se traduce en menos tiempo para entrenar, mayor riesgo de
lesiones musculares, mayor cansancio, disminución del rendimiento físico de los
futbolistas y en la calidad del juego, necesidad de plantillas más numerosas,
incremento en el presupuesto de sueldo anual… ¿captan el mensaje?
Las federaciones deberían reducir progresivamente la cantidad de
clubes por división, como mínimo bajar de 20 a 18, y luego de un año quizás
llegar a 16. Serían menos partidos y más días de entrenamiento. Se podrían
coordinar mejor los derechos televisivos para transmitir siempre la mayor
cantidad de partidos sin sacrificar la calidad del espectáculo y a la vez
protegiendo la integridad física de los futbolistas, únicos protagonistas de
esta película. Hay muchas variables en esta ecuación pero me parece que un
punto de partida básico sería ese.
Un club de fútbol bien gestionado es capaz de generar ingresos
comparables a una gran empresa, pero debe siempre recordar cuál es la base
fundamental de su estructura: la pelota. Si la pelota no entra en la portería
no habrá victorias, y al final el dinero dejará de crecer en los árboles.
Presidentes como Florentino Pérez dieron inicio a una espiral de inflación
progresiva en los costes de toda la industria futbolística permitiendo el
aumento acelerado de los sueldos de sus mejores futbolistas. Ese mecanismo se
estandarizó durante la pasada década y explotó en la cara de Michel Platini, el
actual presidente de la UEFA.
Su concepto del Financial Fair Play (FFP) se basa en la idea de
que cada club deba gastar exclusivamente el dinero que genere, gestionándose
como une empresa cotizable cualquiera. De ese modo, no sería viable una
situación como la de la mitad de los clubes en la primera división española que
se encuentran en concurso de acreedores, legalmente congelados por sus deudas,
pero igual se permiten contratar jugadores y competir en el torneo de Liga.
Tampoco sería tolerable lo del Manchester City FC o el Paris Saint-Germain FC,
equipos cuyo propietario es un jeque árabe con inmenso poder adquisitivo que
inyecta el dinero en las arcas del club y luego realiza gastos
desproporcionados en sueldos, inflando el mercado a base de deudas, algo que ya
sabemos puede terminar en la mágica palabra crisis.
Apenas fue anunciado el plan del FFP se empezaron a notar los
cambios en la gestión de ciertos clubes que actualmente están en pleno proceso
de transición. Un ejemplo evidente es el Real Madrid cuya tradición desde que Florentino
Pérez es presidente era la de comprar jugadores de gran talento a precios sobre
inflados con sueldos más inflados aún (ejemplo Cristiano Ronaldo, precio €98M +
ficha de €10M anual). Luego de gastarse más de €250M en el verano 2009 (CR7,
Kaká, Benzema) para ver al FC Barcelona levantar todo trofeo habido y por
haber, la dirigencia decidió realizar un último gasto con la contratación de
José Mourinho para controlar todos los aspectos del club a nivel deportivo,
incluso eliminando la figura del antiguo Director Deportivo (Jorge Valdano).
El secreto ahora es invertir de manera inteligente, comprando sólo
lo que sea funcional para el proyecto, evitando pagar un precio excesivo y
buscando generar ingresos de muchas maneras, en pocas palabras, buscar el
equilibrio de la rentabilidad con el éxito deportivo. El Arsenal ha sido
redimensionado desde su último título en el 2004, vendiendo los jugadores más
importantes cada verano (Vieira, Fábregas, Van Persie) y limitando el tope
salarial mientras el nuevo estadio patrocinado por Fly Emirates genera mayores
ingresos que el antiguo Highbury. El resultado ha sido la rentabilidad
económica al precio de renunciar al título de la Premier y al de la Champions.
Los clubes que no gestionaron de manera inteligente y progresiva
esta transición se vieron hundidos en situaciones embarazosas que a mediano
plazo empeoran la imagen y el prestigio de la entidad, poniendo en riesgo parte
del potencial económico que significa dicha imagen. Ejemplos de esta mala
gestión se encuentran primordialmente en Italia, empezando por el Milan de
Berlusconi seguido del Inter de Moratti hasta llegar a la nueva Roma desde que
la familia Sensi vendió la propiedad. Las excepciones de lujo son el magnífico
Napoli de Aurelio De Laurentiis, relegado a Serie C por bancarrota en 2004 y
regenerado desde sus cenizas por el productor de cine italiano gracias a una
admirable gestión, llegando a competir por el Scudetto actual y llegando a
octavos de Champions.
Mención especial merece la Juventus que también fue relegada a
Serie B en 2006 pero por razones legales (deslealtad deportiva) y luego de un
año regresó a la máxima categoría, realizando un proceso de transición durante
dos largos años hasta que Andrea Agnelli, nieto del grande Umberto Agnelli, tomó
las riendas del club y lo regresó al lugar que se merece, el primer puesto de
la tabla. Con contrataciones inteligentes (Pirlo, Barzagli, Vidal) y una
excelente apuesta deportiva en el banquillo (Antonio Conte), acompañados por el
primer y único estadio de propiedad en toda Italia (Juventus Stadium), el
equipo está listo para agregar otro Scudetto a las vitrinas y a la vez buscar
esa soñada tercera Orejona.
Está de más decir que veremos muchos más cambios de aquí hasta el
2018 cuando termine el plazo para la transición establecida por Platini, tiempo
que tendrán los clubes para regular sus cuentas y acatar en pleno el FFP.
Mientras tanto podremos seguir entretenidos con la pelota en su más pura
expresión, y para ello les dejo mi análisis de la temporada 2012/2013, con
pronósticos incluidos.
ENGLISH PREMIER LEAGUE
Según la UEFA es el mejor torneo del ranking europeo, así que le
damos la prioridad. El año pasado pronostiqué un duelo Chelsea vs Manchester
United con irrupciones de Liverpool y Manchester City, dejando al Arsenal de
5to. El United tuvo el título en las manos durante unos minutos en la última
fecha y lo vio escaparse al lado azul de la ciudad gracias a una inusual impotencia
goleadora al igual que una alarmante fragilidad defensiva. El Chelsea rompió
todos los pronósticos debido a la desastrosa gestión deportiva de André Vilas-Boas
cediendo terreno ante un Arsenal que volvió a sacar máximo rendimiento de un
plantel limitado, y al elemento sorpresa, el Tottenham Hottspurs.
Este año la competencia debe ser parecida a la del año pasado, con
una diferencia fundamental: el rival del City no será el United sino el
Chelsea. La plantilla más completa sigue siendo la de Roberto Mancini, con
talento y potencial en todas las filas. La inclusión de Carlos Tévez suplirá la
ausencia por lesión de Agüero durante el primer cuarto de temporada y luego se
transformará en el mayor potencial de ataque del torneo. Debido al FFP el club
no realizó incorporaciones importantes, pero debo resaltar la llegada de Maicon
al carril derecho para competir con Zabaleta y Richards. Uno de estos dos sobra
y no me sorprendería verlo partir en enero.
Si a nivel individual fue suficiente el talento para obtener el
título el año pasado, a nivel colectivo siguen teniendo los mismos problemas
estructurales pues el 4-2-3-1 de Mancini deja la defensa vulnerable, obligando
al equipo a anotar una cantidad muy alta de goles si desean conservar el trofeo
un segundo año. No tengo dudas que veremos una mejor versión de Balotelli este
año, si Roberto le otorga oportunidades al Azzurro, y eso junto a la
explosividad del Apache serán las mejores cartas de Mancini para reeditar el
título.
El principal rival del City será el equipo que más dinero gastó en
refuerzos durante el verano, cercano a los €100M. El Chelsea flamante campeón
de Europa sufrió la pérdida más dolorosa cuando Didier Drogba decidió acabar su
ciclo con los Blues luego de prácticamente cargarse al equipo al hombro en las
semifinales ante al Barcelona. Pero los problemas de Roberto Di Matteo no
acaban acá. A pesar de contar en sus filas con talentos puros como Oscar o
Hazard, ha quedado demostrado (especialmente en la Supercopa UEFA frente al
Atlético) que la evolución del equipo en la era post-Drogba requerirá algo más
que pies educados.
Si el año pasado Di Matteo logró enderezar al equipo ubicando a
los jugadores en un 4-3-3 donde cada jugador tenía un rol claro y natural, este
año los fichajes del club indican que la formación predominante será el
4-2-3-1, renunciando a un mediocampista y agregando una media punta. Parece
inverosímil que un cambio tan ligero tenga resultados tan drásticos pero la
realidad es esa, y la clave es Lampard. El internacional inglés deberá trabajar
junto a Mikel en un doble pivote de contención sin libertad de subir a la zona
donde crea más peligro, tal como hacía en sus años mozos.
Di Matteo se equivoca porque Frankie no ofrece seguridad en esa
zona, no ataca y tampoco cubre bien el campo, no se comunica bien con Mikel y
así crea problemas a la defensa que debe siempre acortar distancias para
cubrirle las espaldas al doble pivote desajustando la última línea. Si enfrente
tienen un delantero de calidad (como por ejemplo Falcao) tendrán que buscar la
pelota a espaldas de Cech más de una vez esta temporada. A todo esto hay que
agregar la lentitud de Mata jugando detrás de la punta, sin esa visión de juego
tan natural en un 10 (cosa que él no es), derivando en una circulación
horizontal del balón que no produce peligro.
Por último existe el fantasma de Drogba. Torres se ha convertido
en la punta principal del equipo luego de la salida del marfileño, pero sus
compañeros parecen seguir persiguiendo la sombra de Didier pues hemos visto una
extraña tendencia a lanzar pelotazos al área donde las capacidades del Niño se
reducen a las de un jugador de segunda. El potencial del equipo en ataque es
enorme, pero Di Matteo debe resolver la situación durante la semana buscando
quizás regresar a la titularidad a Meireles y ubicar a Lampard en su zona
natural, con el 4-3-3 que le trajo la Orejona.
Luego de los dos principales candidatos viene el United de
Ferguson. La incorporación de Van Persie y Kagawa restituyen algo del potencial
ofensivo que faltó el año pasado, especialmente cuando Rooney recupere su
estado físico y logre conectar con el holandés. Pero la fragilidad defensiva
del equipo permanece intacta y eso deberá costarles caro este año. El problema
radica en la ausencia de mediocampistas que mezclen calidad con potencia
física, como lo era por ejemplo Roy Keane. Tom Cleverly es joven y promete pero
carece aun de la experiencia necesaria para medir la importancia de un partido
y actuar en consecuencia, algo demostrado a nivel de selecciones frente a Ucrania.
La seguridad en el arco de De Gea deberá ser más regular este año
luego de pagar novatadas en cantidades el año pasado, y el regreso de Vidic,
lesionado gran parte del curso anterior, permitirá una mayor regularidad a
largo plazo. Quizás el equipo de Ferguson pueda evitar otra dolorosa derrota
ante el City este año, no espero ver otra goleada de esa índole en mucho
tiempo, pero seguramente el United debe aceptar que actualmente es inferior
tanto al City como al Chelsea.
Del sorprendente Tottenham del año pasado casi no queda nada,
apenas la sombra. Bajo las riendas del nuevo entrenador, André Vilas-Boas, no
se auspicia un futuro brillante debido a su aparente escaso tacto para
gestionar un grupo de futbolistas. Por su parte el Arsenal de Wenger vuelve a
cambiar cara este año con la pérdida de Song y Van Persie. A cambio llegaron
Cazorla y Giroud, además de Lukas Podolski quien tomará casi siempre el lugar
de Theo Walcott, actualmente poco utilizado por decisión técnica de Wenger. El
sistema sigue siendo el mismo, un 4-2-3-1 donde los movimientos deben ser
fluidos y el arco se termina cerrando por la ausencia de un 9 verdadero. El
equipo tiene suficiente para competir por un puesto en Champions League gracias
a la escasa competencia (Liverpool y Tottenham enfrentan sendos cambios a nivel
interno) y el 4to lugar parece seguro.
LIGA ESPAÑOLA 1ra DIVISIÓN
El segundo torneo según el ranking UEFA es la Liga BBVA de España.
A pesar de ser un torneo sin valor competitivo debido a la abismal diferencia
entre los dos grandes y el resto del montón, pocas veces en la historia se ha
visto una coincidencia de momentos positivos para ambos clubes tan duradera
como la presente. Lo más normal era ver al Madrid disfrutar un poco de éxito
mientras el Barça atravesaba un período de transición y crisis, o viceversa,
pero nunca se había visto que ambos estuvieran en la cresta de la ola al mismo
tiempo.
Es por esto que aún se puede disfrutar un partido de la Liga
mientras al menos uno de los dos participe. La diferencia es que no existe
emoción o miedo a que el rival de turno compita por el título si vence al
Madrid o al Barça. Es más bien una carrera de dos caballos con obstáculos,
donde sabes que el otro caballo probablemente tropezará dos o tres veces
máximo. Ambos equipos están llenos de talento y potencial, organización y
estrategia, pero sus filosofías son prácticamente opuestas, lo que entrega un
espectáculo único y atrayente.
Empezaremos con el campeón defensor. Debemos decir que el equipo
apenas cambió un ápice respecto a la temporada pasada. Podemos recitar el once
titular de Mourinho con los ojos cerrados, anticipar los movimientos de sus
jugadores y hasta imaginar los cambios habituales del portugués. La calidad de
los jugadores no se discute, es una de las plantillas más balanceadas del
planeta, incluso contando el factor de la edad pues hay aún margen para el
crecimiento, apenas 3 integrantes superan los 30 años (Casillas 31, Xabi Alonso
30, Carvalho 34).
El entendimiento colectivo de los jugadores ha ido in crescendo a velocidad asombrosa desde
que el portugués tomó las riendas del club hace ya 2 veranos. El objetivo
principal era acabar con la hegemonía blaugrana que había instaurado Guardiola,
regresando al Madrid a la cima del panorama europeo. La progresión de éxitos y
títulos obtenidos por el conjunto merengue ha ido en paralelo con la de trofeos
que ha perdido el club catalán, primero cediendo la Copa del Rey, luego la Liga
y finalmente la Supercopa. El siguiente paso es completar la escalera
extendiendo la mano fuera de las fronteras españolas, es decir, traer la
condenada Décima Copa de Europa.
El equipo está perfectamente preparado para competir nuevamente
por el título de liga mientras buscan acabar con la obsesión de todo fanático
blanco desde hace 10 años, la Champions. Mourinho trajo dos piezas nuevas a su
rompecabezas, Luka Modric y Michael Essien. Ambos jugadores cumplen a la
perfección los roles particulares que dejaron vacantes Nuri Sahin y Lassana
Diarra, es decir, los dos mediocentros delante de la defensa. Adicionalmente,
el polivalente croata tiene una marcada tendencia ofensiva que le permite
cubrir también el puesto del 10 en ausencia justamente de Mezut Özil, tomando
en cuenta que Kaká no dejó la casa blanca porque nadie en el mundo estaba
dispuesto a pagarle el sueldo de €9M netos que establece su contrato. El
brasileño nunca ha sido un empleado conflictivo y no causará problemas al
vestuario, de modo que será útil como sparring
partner para los entrenamientos, pero no jugará casi nunca en la temporada.
La portería cuenta con Casillas, así que sobran palabras. La
defensa es veloz y equilibrada, bien cubierta por derecha con Arbeloa y
bastante incisiva por izquierda con Marcelo. La pareja de centrales Pepe-Ramos
es de las mejores del mundo, pero en ausencia del portugués se nota la falta de
agresividad y anticipación como vimos durante el partido de ida de la
Supercopa. El mediocampo está completo en todos sus sectores mientras que el
ataque es simplemente uno de los mejores de Europa, especialmente a la contra.
Los malos resultados de las primeras fechas se explican
fácilmente. No crean en cuentos de prensa deportiva, especialmente española
(MARCA, AS, MUNDO DEPORTIVO, SPORT) porque no hacen más que vender calumnias y
especulaciones. El equipo de Mourinho, tan poderoso la temporada pasada, capaz
de derrotar finalmente al Barça de Guardiola no sufrió una mutación mágica en
vacaciones. Si eran campeones indiscutibles hace poco no son ineptos ahora. No
puede ser coincidencia que hayan mostrado su verdadera cara frente al Barcelona
en la Supercopa luego de un partido mediocre en Getafe. El conjunto blanco
sufre un complejo de superioridad y se nota porque bajan la intensidad cuando
el rival es inferior pero regresan a su nivel habitual cuando la dificultad
aumenta. La demostración de mi teoría debería llegar hoy cuando reciban al
Manchester City en el Bernabéu.
En la otra esquina está el retador, el FC Barcelona. La plantilla
tampoco cambió respecto al año pasado con la excepción de Keita quien fue
sustituido por Song del Arsenal. Hubo sin embargo una adquisición relevante en
la defensa con la llegada de Jordi Alba, prácticamente para ocupar el puesto de
Eric Abidal quien debido al cáncer que padece se encontrará lamentablemente más
cercano al retiro que al campo de juego. Si consideramos que la temporada
pasada estuvo prácticamente 6 meses fuera de actividad, la recuperación de
David Villa puede ser el mejor fichaje del ataque blaugrana por su claridad y
simplicidad de cara a puerta. Lo mismo se puede decir sobre Puyol en defensa.
Bajo circunstancias normales el culé sería el equipo a batir en
toda competición, pero la ausencia de Josep Guardiola será el verdadero
obstáculo a vencer por parte del equipo blaugrana. En verdad esto representa un
misterio para todo el mundo. Nadie sabe a ciencia cierta qué papel jugó Tito
Vilanova en los éxitos del club durante la era Pep. Las opciones son variadas:
¿era Pep el artífice de todo y Tito simplemente un consejero ocasional? ¿Era
Pep un buen motivador y gestor de personal pero requería de las innovaciones
tácticas de Tito para vencer en el campo? ¿Será que Tito era el titiritero y
Pep simplemente ofrecía la cara al público? Para especular estados todos más
que preparados, pero hasta que se pruebe lo contrario, debemos asumir que
simplemente formaban Tito y Pep un dúo formidable. Ahora el reto es saber si
Tito puede hacer de Pep, y si el nuevo sabe hacer de Tito.
Dentro del campo las cosas por lo pronto están mucho más claras.
El proyecto del club no se ha distanciado nada del camino trazado por Guardiola
así que podemos también recitar las formaciones y las jugadas del Barça de
memoria, del mismo modo los cambios. El arma secreta debería ser la misma del
año pasado: Cesc Fábregas. El ex Arsenal muestra su mejor rendimiento cuando se
encuentra en la zona del 10, tal como lo utilizó Del Bosque en la Eurocopa, pero
tanto Pep al final de la temporada pasada como Tito al inicio de esta lo ubican
en la zona mediana como sustituto de Iniesta o Xavi. De hecho, la actual lesión
del Mejor Jugador del Mundo (sí, hablo de Iniesta) permitirá a Cesc jugar
titular durante las próximas 2-3 semanas, la ocasión perfecta para demostrar la
veracidad o falsedad de mi argumento.
A diferencia del Madrid, el Barça cuenta con un equipo cuya zona
más sólida es el mediocampo, seguido del ataque. El trío del centro es la base
tanto del club como de la selección y en el mundo no tienen comparación
actualmente. El ataque es prácticamente Messi y sólo Messi. Pedro y Villa
deberían ser titulares pero hasta ahora uno de los dos comparte las bandas con
Alexis, lo cual me resulta un error de Tito. Luego de verlo volar en la Serie
A, el primer año del chileno en la Liga española demuestra que su velocidad se aprovecha
mejor jugando a la contra, porque cuando tiene que enfrentar una defensa escalonada
tiende a perder la esférica. Jugando en el Barça esta situación se repetirá el
60% del tiempo a juzgar por los números de posesión que ostenta el club desde
hace 4 años.
La defensa es como siempre el punto débil de este equipo. El
sistema de presión alta funciona bien y los balones se recuperan casi siempre
en ¾ de cancha, pero cada vez que esto falla (y son cada día más frecuentes
estas fallas) la defensa queda al desnudo con todas sus grietas. La generación
de Xavi & Co. es única y extraordinaria, pero el recambio no puede ser del
mismo nivel y el rendimiento se nota. Es por eso que tanto Pep como ahora Tito
optaron por ubicar a Mascherano como pareja de Piqué en ausencia de Puyol, a
pesar de tener por lo menos otros 3 centrales naturales provenientes de La
Masía. El jefecito es el 5 por excelencia en Argentina, pero como defensor
comete errores y los delanteros veloces (CR7, Pato, Torres) lo han dejado en
evidencia.
La temporada será larga para ambos clubes, paticipando en las 3
competiciones hasta que la muerte los separe. El factor más determinante será
la Champions. El grupo del Barça es años luz más sencillo que el del Madrid,
por lo que le bastará al conjunto culé ganar los primeros 4 y dejarle a La
Masía los últimos dos, dedicándose a la Liga. El duelo del 7 de octubre
ofrecerá al Madrid la oportunidad de recuperar los puntos que perdió al inicio
del torneo cuando los jugadores se encontraban evidentemente desmotivados. Sin
embargo creo que este año la concentración de los blancos estará primordialmente
en Europa, dejando vía libre al Barcelona para retomar el trono local.
SERIE A ITALIANA
El cuarto torneo según el ranking de la UEFA, el torneo más
difícil del mundo sin lugar a dudas por la complejidad táctica de cada partido,
la Serie A italiana no es el lugar más idílico para un futbolista ni ofrece el
espectáculo más apetecible al aficionado, pero representa la prueba más
exigente a nivel físico y psicológico tanto para futbolistas como entrenadores.
Ningún torneo le ha ofrecido al mundo más equipos campeones ni tantos
galardones individuales, justamente porque la mayor adversidad saca a relucir
la excelencia.
Dicho esto, la gestión de los mejores clubes italianos ha decaído
en los últimos 10 años y apenas ahora atraviesa una etapa crucial en su
reestructuración a todos los niveles. Dentro de 5 años podría volver a formar
parte del podio europeo, pero mientras tanto deberá continuar recuperando el
terreno perdido paso a paso. El camino a seguir lo marca el que es sin duda el
mejor club italiano de la actualidad y el único capaz de competir al nivel de
los grandes de Europa: la Juve. El equilibrio logrado por Conte es
espectacular, un equipo donde no hay jugadores menospreciados, todos son
prácticamente titulares y ofrecen el mismo compromiso dentro del campo, con
resultados siempre óptimos. Sin dudas el equipo a vencer este año será la Vecchia Signora.
La plantilla no fue modificada en absoluto y luego de las
incorporaciones del verano existen dos jugadores de buena calidad por puesto.
La base es un 3-5-2 donde los laterales corren toda la banda y dan equilibrio a
la mejor defensa de toda Europa durante la temporada pasada (17 goles en 38
partidos). El centro del campo cuenta con dos jugadores mixtos, capaces de
sumarse al ataque por sorpresa si es necesario, por supuesto girando entorno a
Andrea Pirlo, el único jugador insustituible del equipo. No hay delanteros de
potencia en el club, la única flaqueza de una plantilla muy equilibrada, algo
que podría costarle especialmente en Europa donde las individualidades se hacen
notar.
La suspensión de Antonio Conte debido al caso de las apuestas lo
mantendrá fuera del campo durante 10 meses, por lo que en su lugar estará
Massimo Carrera quien ha demostrado por lo menos saber mantener la filosofía de
Conte intacta. El mayor reto de la Juve será gestionar la plantilla en función
de la Champions. Ya pasaron un susto este fin de semana ante Genoa por reservar
un par de titulares y tuvieron que reaccionar en el segundo tiempo, pero es aún
muy pronto para sacar conclusiones. Si los jugadores que habitualmente juegan
menos aprenden a asimilar los conceptos y el ritmo que busca Conte durante los
entrenamientos entonces tendrán el camino al Scudetto bastante despejado.
El rival principal de la Juve será el Napoli de Mazzarri. Es el
único equipo que mantiene la forma y estructura del año pasado, agregando un
par de piezas claves para mejorar el rendimiento ofrecido en los últimos 12
meses tanto en Europa como en la Serie A. La pérdida de Lavezzi está más que
cubierta por el joven Insigne, así como el mayor protagonismo que tienen ahora
tanto Pandev como el chileno Vargas. El ataque del Napoli cuenta además con uno
de los mejores 3 atacantes del planeta, el único que considero al mismo nivel
de Radamel Falcao García hoy mismo, se llama Edinson Cavani.
Los problemas para Mazzarri serán los partidos post-Europa League.
En vista que el torneo menor de Europa se juega siempre el jueves, requerirá un
mayor esfuerzo de parte de sus jugadores titulares sostener el mismo
rendimiento físico la fecha liguera siguiente, algunas veces descansando dos
días y medio. Son muchos equipos los que pagan el precio de la doble
competición cuando la plantilla no está preparada, tal como le sucedió al
Udinese la temporada pasada. Si Mazzarri le da prioridad al campeonato
italiano, dejando un poco de lado la competición europea (poco atractivo,
premios menores) podría dar la campanada en el sur de Italia aprovechando que
la Juventus tendrá la mente en Europa y traer el Scudetto al San Paolo por 3ra
vez en la historia, algo que sólo Maradona pudo hacer hasta ahora.
Luego de la Juve y el Napoli, candidatos seguros al Scudetto, le
toca al pelotón de los equipos que tienen potencial para disputar un partido
con cualquiera pero de ninguna manera cuentan con la continuidad para ganar el
título, al menos no este año. El primer caso es el Internazionale. Cuenta con
un plantel lleno de jugadores talentosos en todas las posiciones pero ha
cambiado tanto que le tomará tiempo a Andrea Stramaccioni lograr una cohesión
perfecta entre ellos.
El joven entrenador llevó al conjunto juvenil Nerazzurro al título
europeo poco antes de ser nombrado sucesor de Claudio Ranieri el año pasado al
mando del equipo mayor. Su formación preferida es un 4-4-2 con rombo donde
Sneijder es el 10, justo la zona donde mejor se expresa el virtuoso Oranje. Le sobran opciones en un ataque
donde Milito sigue siendo el príncipe y Cassano es el arma secreta, utilizada a
cuentagotas debido a su aún incompleta preparación física.
Los problemas para el Inter vienen atrás. Los jugadores no se
discuten pero el entrenador no ha sabido elegirlos de manera correcta. La
utilización de un 10 con dos puntas deja un mediocampo de 3 que resulta
dinámico pero estrecho, obligando a los centrales defensivos a movimientos a
alta velocidad, basta que uno de ellos equivoque la coordinación para abrirle
espacio al rival. Dicho en pocas palabras, el Inter tendrá vida fácil ante
equipos lentos pero sufrirá demasiado ante rivales dinámicos y veloces (ejemplo
Roma). Si se mantienen tanto el entrenador como los jugadores, el año que viene
podrían aspirar a pelear el título, pero por ahora lo máximo que pueden hacer
es buscarse un lugar en la próxima Champions League.
El otro equipo con el mismo potencial es la Lazio. El año pasado
demostraron que tienen suficiente para pelear de tú a tú con Napoli y Juventus,
dejando en el camino al Inter pero sucumbiendo al final ante el Udinese. El
actual entrenador mantiene el mismo equipo pero ha logrado mejorar el
rendimiento del jugador clave en la plantilla, Hernanes, permitiéndole libertad
de movimientos en el medio para encarar siempre el campo de frente y aprovechar
su visión de juego. La habilidad del brasileño ya se ha puesto de manifiesto y
será así durante todo el campeonato si las lesiones no lo impiden,
especialmente cuando Miroslav Klose juegue delante.
El mismo argumento de distribución de energías entre la Serie A y
la Europa League que aplicamos para Napoli se puede repetir con Inter y Lazio. El
equipo que logre priorizar la liga italiana obtendrá los mejores resultados,
que en esta ocasión significan el 3er lugar y la clasificación a la Champions.
El factor sorpresa aquí se llama Fiorentina. El mismo entrenador
que el año pasado realizó una campaña admirable con el Catania toma las riendas
este año del club toscano con una plantilla repotenciada y ambiciosa. El ex
delantero de la Roma y la Azzurra, Vincenzo Montella, cuenta en sus filas con
un mediocampo de mucha calidad y movimiento. Jugadores como Aquilani, Pizarro,
Valero y Cuadrado ofrecen calidad y cantidad. Pero el mayor potencial está en
ataque con la dupla Jovetic-Toni. El veterano Azzurro regresa luego de 6 años a
la ciudad que lo lanzó a la fama y promete hacer muchos goles junto al joven
montenegrino.
La defensa es el único trabajo pendiente de Montella, pero
contando con jugadores jóvenes y todo el tiempo que le permite trabajar sin
pensar en competiciones europeas, confío que el 3-5-2 de la Fiorentina sea cada
vez más parecido al de la Juve en cuanto a solidez y cohesión se refiere,
siempre salvando las distancias del potencial individual. Seguramente apuesto
por un mejor campeonato de la Fiorentina que el de la Roma, y ya les explico el
porqué.
El año pasado logré prever el fracaso absoluto de dos equipos para
los cuales había bastante entusiasmo y expectativa. Uno era el Internazionale,
cambiando entrenador 2 veces durante la temporada luego de la ridícula campaña
de refuerzos que Moratti permitió a sus dirigentes. Un inicio así puede
terminar en fracaso y nada más. El otro fracaso anticipado era el proyecto
ibérico que Luis Enrique pretendió instaurar en la capital italiana. Un equipo
basado en la posesión de la pelota requiere jugadores preparados, más bien
“criados” con esa filosofía. En Barcelona existe La Masía y de ahí salen los
talentos que hoy son campeones de todo con España. En Italia no existe tal
cosa, pero el ingenuo Luis Enrique no quiso ver eso.
El nuevo entrenador se llama Zdenek Zeman. Para muchos desconocido
debido a su pobre palmarés, el checo es un bohemio nato, amante de la filosofía
y antítesis del pragmatismo que representan personajes como Fabio Capello, José
Mourinho o Marcello Lippi, es decir, ganadores. En pocas palabras, Zeman debe
ser el fan número uno de Josep Guardiola por el estilo que impuso en el fútbol.
Sus equipos no se desmienten nunca, juegan con un 4-3-3 dinámico que
prácticamente no defiende, aplica la presión bien arriba en el campo y sabe
sólo atacar. ¿Les suena familiar? ¡Es lo mismo que intentó hacer Luis Enrique!
La plantilla volvió a ser revolucionada con muchos movimientos. Se
fueron Bojan y Borriello en ataque y llegó Destro, un formidable delantero que
sin embargo es aún joven y necesita aprender un par de cosas. La defensa es completamente
nueva y eso trae problemas de adaptación. Además, jugar con puros
mediocampistas de creación y laterales adelantados deja espacios atrás que un
equipo regular sabría explotar, como lo demostró el Bologna este fin remontando
un déficit de 2-0 para ganar 2-3 en el Olimpico de Roma. Quizás la calidad de
la plantilla haya mejorado respecto al año pasado, un poco nada más, pero la
competencia ha aumentado también y no veo qué puede hacer un equipo tan ingenuo
como la Roma en un campeonato tan cínico como el italiano. Hay que entender la
diferencia entre Serie B y Serie A.
Finalmente llegamos al Milan. El actual equipo Rossonero no es ni
la sombra de lo que una vez fue, una potencia del fútbol mundial. El período de
transición que está llevando a cabo la dirigencia seguramente traerá sus frutos
en unos años cuando el FFP llegue a su plazo límite, pero mientras tanto la
gestión de Galliani y Allegri ha sido pésima. Culpas tiene el administrador
delegado por no haber empezado la limpieza del vestuario antes de manera más
progresiva y asimilable, ahora se siente el impacto terrible de la pérdida de
semejantes jugadores en el campo cuando no aparecen por ningún lado las jugadas
mágicas que resuelven momentos de dificultad.
Decepcionante ha sido también la gestión del entrenador porque no
ha sabido explotar al máximo el potencial del plantel cuando lo tuvo. No estoy
de acuerdo con la cesión de algunos jugadores por razones económicas cuando
bien se pudo ahorrar en los sueldos de otros jugadores que no tienen el nivel
requerido para jugar en un equipo de élite mundial. No tiene sentido pagar 7
millones al Inter por Pazzini renunciando a Cassano y pagarle un sueldo de 2.7
millones (fuente: La Gazzetta dello Sport) para quejarse de que el presupuesto
no alcanza cuando jugadores como Robinho, Mexès y Pato ganan 4 millones cada
uno. El primero es incapaz de crear peligro encarando defensores, el segundo
pasó la temporada pasada lesionado y cuando jugó regaló un gol casi hecho nada
menos que a Messi en Champions League, y el tercero ha pasado 3/4 partes de las
últimas dos temporadas lesionado. Si un plan económico ha de realizarse para
controlar gastos innecesarios y mantener el nivel competitivo del equipo tanto
en Italia como en Europa, el modelo a seguir debe ser el de la Juventus o el
del Madrid actual.
La prensa considera al Inter y a la Roma como candidatos al
título, yo no. En mi opinión existen tan solo dos equipos con suficientes
requisitos para ser considerados los candidatos verdaderos. Me inclino por la
Juventus porque en más de una ocasión demostraron saber superar incluso las
adversidades más férreas, remontando partidos que empezaron mal como lo fueron
la Supercoppa ante el Napoli justamente, y más recientemente ante el Genoa.
Para entrar en Champions League debería ser una carrera de tres equipos para un
puesto, con Lazio e Inter aventajando a Fiorentina por un pelo. Finalmente la
Roma podría colarse junto con el Udinese en los puestos de Europa League,
mejorando ligeramente el rendimiento del año pasado, pero aún así un fracaso
considerando las expectativas generales entorno a Zeman. ¿El futuro del Milan?
Depende completamente del entrenador. No durará mucho Allegri en el cargo,
seguramente lo despedirán para tratar de explicar los malos resultados de una
plantilla mediocre. Sea quien sea el sustituto, el resultado no puede ser muy
diferente tampoco, así que todo por debajo del 6to lugar es posible.
BUNDESLIGA Y CHAMPIONAT
La Bundesliga alemana es considerada el 3er mejor torneo de Europa
según el ranking UEFA. Actualmente el mejor conjunto alemán no es el famoso
Bayern München sino el Borussia Dortmund, bicampeón de liga. El equipo
aurinegro cuenta con un plantel que ofrece a la National Mannschaft tantos jugadores como el mismo Bayern, incluso
más en ocasiones, y una de las mejores defensas de Europa. El verano les trajo
un gran talento como Marco Reus que llega al equipo de Klopp para sustituir al
japonés Kagawa quien se fue al Manchester United. La estructura del equipo y el
talento de los jugadores a disposición los convierten nuevamente en candidatos
al título, justo en paralelo al Bayern.
La diferencia podría residir en el torneo europeo como de
costumbre. El año pasado el Bayern perdió muchos puntos en liga debido al gasto
que significó llegar a la final de la Champions, torneo que mantuvo en vilo a
toda la entidad pues la final se jugaba en su estadio lo que creó enorme
ilusión y expectativa. Mientras tanto, la tempranera eliminación del Dortmund
les permitió concentrarse en el torneo local y el título fue el resultado de
esa ventaja. Esta vez la fortuna puso al Dortmund en el grupo de la muerte
junto a los campeones de España, Inglaterra y Holanda, mientras que el conjunto
dirigido por Heynckes podrá disfrutar de un panorama más ligero con un único
rival digno, el Valencia, que a pesar de todo sigue siendo inferior.
La disputa por la Bundesliga deberá estar regulada nuevamente por
el progreso en Champions y esta vez veo al Dortmund con mayores opciones de
ceder terreno, dando al Bayern como favorito a retomar el título local.
En Francia, para terminar con los torneos de liga, el PSG se asoma
como el máximo candidato gracias a la inversión millonaria que el propietario
árabe realizó este verano. Jugadores del nivel de Ibrahimovic y Lavezzi son capaces
de inclinar la balanza a tu favor en cualquier momento, pero el tiempo
necesario para acoplar tantos jugadores nuevos es algo que ninguna cantidad de
dinero puede comprar. Carlo Ancelotti necesitará por lo menos media temporada
para ver al equipo parisino jugar como él quiere, y quizás para ese entonces
sea demasiado tarde. En mi opinión el título en Francia no será tan fácil de
asignar como parece y una eliminación tempranera en Champions podría crear
problemas internos en un vestuario donde sobran los egos, empezando por
Ibracadabra.
LA CHAMPIONS
La pregunta del millón. ¿Quién ganará la Champions 2013? No
existen certezas en este torneo maravilloso, cualquier equipo puede resultar
campeón contra los pronósticos. El año pasado los dos colosos españoles cayeron
en semifinales pero esta noche vuelven a la carga como los máximos favoritos.
Ambos equipos cuentan con iguales probabilidades lógicas de levantar la
Orejona, pero encontrarán resistencia desde varios frentes.
Si Madrid y Barça están un escalón por encima del resto, el
siguiente nivel lo conforman a la par el Bayern München, el Borussia Dortmund,
la Juventus y el Chelsea. En mi opinión esos son los 4 equipos que disputarán,
junto a los ibéricos, las semifinales de la Champions esta temporada. Todos
cuentan con la necesaria continuidad estructural y el talento en potencia que
exige la máxima competición continental.
El potencial de los candidatos lo conocemos y las desventajas de
cada uno se pueden resumir así: el Bayern es plano y vulnerable en defensa; el
Dortmund cuenta con una banca algo corta; la Juventus carece de un delantero de
experiencia en Europa; el Chelsea necesita tiempo para asimilar el nuevo
sistema ofensivo de juego, especialmente delante de la defensa.
Viendo los grupos no me sorprendería ver un par de eliminaciones
tempraneras, empezando por el Manchester City que en mi opinión debería
terminar 3ro detrás de Madrid y Dortmund. Tampoco considero muchas las opciones
del Milan, quizás un 3r lugar detrás de Zenit y Málaga que le permita continuar
en Europa League. El United y el Galatasaray deberían clasificarse a octavos,
así como el Bayern acompañado por el Valencia. La Juventus junto al Chelsea es
casi obligatoria. Los grupos más equilibrados son el A y el B. Mi apuesta es
que el PSG y el Porto pelean el primer lugar, mientras el Arsenal clasifica sin
problemas a octavos junto al Montpellier.