ES HORA DE ESCRIBIR LA HISTORIA

Se acabó la espera. Llegó la hora de coronar al rey de Europa. Es momento del partido más importante del año 2009 para el fútbol europeo: la final de la UEFA Champions League.

La cita es para el miércoles 27 de mayo, a las 20:45 (CET) en el Stadio Olimpico di Roma, Italia. Un estadio que actualmente tiene capacidad para 72.700 espectadores, luego de la remodelación del 2008 donde eliminaron varios asientos, preparando justamente este partido importante. La ciudad eterna será testigo este año de la coronación del mejor equipo del viejo continente, pero hay más. Sea cual sea el equipo vencedor, el resultado escribirá una página importantísima en la historia del fútbol mundial.

Vamos a explicar esto un poco. En esta esquina, con colores blaugrana y camiseta nueva, el FC Barcelona, nuevo campeón de la Liga Española de Primera División y la Copa de su Majestad el Rey de España. Si los culés ganan la final se transformarían en el 5^to club en la historia (y el primer español) en lograr el Triplete (Liga, Copa y Champions). El último equipo en lograrlo fue justamente el Manchester United hace 10 años, mientras previamente lo hicieron PSV Eindhoven (1988), Ajax Amsterdam (1972) y Celtic Glasgow (1967), quien fue el primer club en lograr la hazaña.

En la otra esquina, con camiseta blanca para la ocasión, el Tricampeón de Inglaterra, Campeón defensor de Europa y del Mundo, el Manchester United. Si gana logrará ser el primer equipo en defender su título europeo en los últimos 20 años, y el primero desde que el torneo cambió su antiguo nombre “Copa de Campeones” al actual formato “UEFA Champions League”, en 1992. Habiendo ganado también los últimos 3 torneos de Premier League junto con el actual Mundial de Clubes, una eventual victoria en la Champions certificaría el dominio absoluto de los Red Devils en el fútbol mundial.

(arriba: El gran Milan de Sacchi, Bicampeón de Europa y el mundo en 1989 y 1990. Sentados de izquierda a derecha, Franco Baresi, Roberto Donadoni, Alessandro Costacurta, Angelo Colombo, Mauro Tassotti; de pie, Paolo Maldini, Marco van Basten, Ruud Gullit, Carlo Ancelotti, Frank Rijkaard, Giovanni Galli)

Entonces, ¿solo una final? No señores, este partido es de los que marcan épocas. En estos partidos se crean las leyendas, se escriben los libros de historia y de ellos se hablará durante las siguientes décadas, como lo hacemos ahora con los que dejaron su huella en el pasado. Quizás para un aficionado común sea difícil encontrar la poesía que este servidor disfruta con estos momentos, pero les aseguro que todos los fanáticos Culés y Reds que andan por allí (y conozco demasiados culés, así que lo certifico) sueñan desde pequeños con un momento de gloria semejante.

Ahora que sabemos lo mucho que está en juego sale a relucir la pregunta del millón: ¿quién ganará? Claro, si lo supiera no estaría escribiendo esto y el millón lo tendría ya probablemente. Esta es una de las finales más parejas de los últimos años, sin claro favorito. La lógica y la matemática dicen que el empate y los penales son muy probables, pero afortunadamente el fútbol regala siempre sorpresas. Así que, de nuevo, usando solamente la lógica y las probabilidades, podemos tratar de predecir el desarrollo del juego a la espera de esas jugadas y maniobras mágicas e impredecibles que solo este deporte puede ofrecer.

(arriba: El Triplete del Manchester United en 1999. A la izquierda, el trofeo de la Premier League; a la derecha la Copa F.A. de Inglaterra; y en el centro la “Orejona”)

El FC Barcelona es el equipo que mayor posesión de balón practica probablemente en el mundo, y por eso es fácil asegurar que serán ellos los que tengan la esférica la mayor parte del tiempo. La harán girar como de costumbre, lado a lado, usando algunas veces a Eto’o como pivote para descargar por las bandas, donde están siempre Henry y Messi, que reciben el apoyo de los laterales Abidal o Alves. Aquí es donde entra el desequilibrio que pueden provocar ellos con fintas y toques de magia, aprovechando también la llegada de Xavi e Iniesta desde el centro para rematar si la defensa les ofrece el espacio.

Para esta final, sin embargo, Guardiola tendrá que inventarse un poco el equipo debido a ciertas ausencias, especialmente en defensa. Abidal está lesionado y Alves es duda, por lo que es probable la presencia de Silvinho por izquierda y Puyol por derecha. Piqué debería mantener su puesto central, pero acompañado esta vez por Yaya Tourè, una improvisación que ya hizo Guardiola hace poco y no dio malos resultados. El mediocampo ya tiene a Iniesta confirmado, luego de recuperar su lesión muscular, así como a Keita. Ambos acompañarán al dueño y señor del juego blaugrana, Xavi Hernández (no me canso de elogiar al de Terrassa). El ataque será el de lujo, con el recuperado Henry por izquierda, Messi por derecha y Eto’o como punta de lanza.

Ahora hablemos del Manchester. Los Red Devils, vestidos de blanco, buscarán explotar el contragolpe veloz como lo hicieron el año pasado en semifinales contra los catalanes, así como lo hizo también el Chelsea este año. Vamos a estar claros, el Manchester tiene velocidad en ataque para derrochar. Usarán una formación 4-2-3-1 bien flexible, que se transforma en 4-5-1 cuando defienden para luego soltar las bandas en contragolpe.

Con Van der Saar en la portería, es muy probable que sea John O’Shea el elegido para cubrir la banda derecha, mientras Evra se encargará de la izquierda como siempre. Ferdinand será titular junto a Vidic, si se recupera el inglés por supuesto. Uno de los pivotes del mediocampo debe ser Michael Carrick mientras el otro puede ser uno entre Anderson o Scholes. Éste último para mí será el elegido. Ferguson dijo que Berbatov y Tévez estarían en la banca, lo que podría significar el uso de Cristiano como media punta central, detrás de Rooney, dejando las bandas para Park Ji-Sung y Ryan Giggs.

Con esa formación tratará de meter presión a los laterales catalanes, limitando los movimientos de Messi particularmente por la banda. ¿Improvisará de nuevo Guardiola a Messi por el centro, en respuesta a la posible táctica de Ferguson? Pep usualmente mantiene su juego “de la casa” y pocas veces modifica el estilo en función del rival, pero es una posibilidad a mitad de juego si las cosas no funcionan bien.

Si ponemos ambos planteamientos tácticos en el campo encontramos varios duelos que podrían ser determinantes, por supuesto involucrando a las dos estrellas de la noche: Messi y Cristiano. Si embargo, la clave del asunto estará como siempre en los pies de Xavi Hernández. El Manchester tiene la ventaja de saber que el punto débil del rival es bloquear a Xavi, eliminando así la creación blaugrana como lo hizo el Chelsea previamente. El Barça no puede esperar que el árbitro les vuelva a ayudar, o que sus rivales fallen todas las oportunidades de gol que seguramente crearán.

(abajo: Los Red Devils celebran la victoria en la final de la Champions League 1999, casualmente jugada en el estadio Nou Camp de Barcelona)

Y entonces, ¿cuál es la ventaja del Barcelona? Pues su propio talento. Con su impresionante calidad de posesión de balón, el Barcelona fuerza constantemente al rival a cometer un error que le costará caro, ya que se requiere una concentración perfecta para mantener todos los espacios cerrados durante 90 minutos, y aún así Iniesta te puede arruinar la noche en el descuento (pregúntenle al Chelsea). Es mucho más probable que un rival se distraiga y se desconcentre, cometiendo un error al tratar de quitarle el balón al Barça, antes que un jugador blaugrana se equivoque y pierda el balón durante la ejecución de un pase.

Yo sinceramente sabía que el Chelsea era capaz de anular al Barcelona, pero contaba con que iban a explotar mejor las oportunidades de contragolpe. Ahora tengo otra oportunidad de acertar el pronóstico y creo que el Manchester United tiene un ataque incluso más efectivo, por lo que voy una vez más contra los culés. Como dicen en mi tierra: “gallo que no repite no es gallo”… MANCHESTER UNITED GANARÁ LA FINAL.

Formaciones probables:

FC Barcelona (4-3-3): Valdés – Puyol, Piqué, Touré, Silvinho – Xavi, Keita, Iniesta – Messi, Eto’o, Henry.

Manchester United (4-2-3-1): Van der Saar – O’Shea, Ferdinand, Vidic, Evra – Carrick, Scholes – Park, Cristiano, Giggs - Rooney

Como dije antes, sea quien sea el vencedor, escribirá una de las páginas más gloriosas del fútbol mundial y quedará inmortalizado en la memoria de todo aquel que lo presencie, para poder contarlo a las generaciones siguientes.

Antes de despedirme, un detalle que no puedo pasar por alto. El lunes que viene me encargaré de hacerle un necesario homenaje a un símbolo del fútbol, no solo italiano, sino mundial: Paolo Maldini. Este domingo jugó por última vez en su estadio, Giuseppe Meazza de San Siro, Milano. Casi todo el público lo fue a saludar con bufandas, franelas y pancartas celebrativas, lo mínimo que se puede hacer por el gran capitán.

(arriba: Paolo Maldini, nacido en Milano el 26 de junio de 1968; Cristian Maldini, nacido en Milano el 14 de junio de 1996; Daniel Maldini, nacido en MIlano el 11 de octubre del 2001)

Tal como había previsto, mi equipo sufrió con la Roma gracias a los errores de Ancelotti y se tendrá que decidir todo en la última fecha contra la Fiorentina. Carletto está ya con las maletas hechas para mudarse a Londres, donde lo espera Abramovic, mientras parece que no será Marco van Basten a entrenar al Milan sino Leonardo Nascimento de Araújo, el gran Leo, junto con Mauro Tassotti y Filippo Galli. Es triste, sin embargo, ver cómo un grupo de imbéciles optaron por arruinar el homenaje a Paolo, mediante pancartas y cantos que hacen referencia al otro gran capitán que lo precedió, Franco Baresi, acusando a Paolo de ingrato.

(arriba: “Gracias capitán: en el campo campeón infinito pero le has faltado el respeto a quien te ha enriquecido”. La Curva Sud del estadio San Siro muestra desprecio hacia Paolo en lugar de homenajearlo. No merecen ser llamados milanistas)

(abajo: “Maldini: desde 20 años en el campo rival pero en la vida siempre leal”. El Inter, el más odiado por cualquier milanista, muestra el respeto debido a un digno rival)

La grandeza se nota con la actitud del resto del mundo, donde incluso sus rivales reconocen la clase y el respeto que merece semejante jugador, incluidos los fanáticos del Inter, que mostraron un mensaje lleno de nobleza durante el último Derby, honorando a quién ha sido su rival durante 25 años de carrera. A pesar de lo que piensen algunos idiotas descerebrados, Paolo Maldini es más que un jugador, más que un capitán, más que un símbolo… como dicen por ahí: “los héroes son recordados, pero las leyendas nunca mueren”. Yo estaré allí presente, el domingo 31 de mayo, en el estadio Artemio Franchi de Firenze, cuando Paolo Maldini deje de ser un jugador activo, luego de 25 años, y pase a ser una leyenda. Arrivederci.