Bienvenidos a Suráfrica...
La Naranja Mecánica logró hipotecar ya su boleto a los octavos de final con una victoria por la mínima sobre Japón, pero siguen presentes las mismas limitaciones del primer partido y hasta ahora nadie las ha sabido explotar. ¿Se habrán dado cuenta?...
Los nipones no arriesgaron mucho ante un rival de peso y decidieron bloquearles la entrada poblando el mediocampo, sabiendo bien que Holanda tiene la tendencia de jugar en horizontal hasta que encuentra el espacio para la verticalización aprovechando la profundidad que ofrece Van Persie. Es por eso que Japón presionó bastante a los dueños de la pelota cerca del círculo central y no les dejaron ver nunca ese hueco donde meter el balón filtrado.
Nigel de Jong y Mark van Bommel sufrieron todo el partido la posición extraña de Rafael Van der Vaart, quien fue ubicado en tierra de nadie, en algún punto entre la línea del mediocampo y la media punta izquierda, sin llegar a ser ni lo uno ni lo otro. Sus características se aprovechan mucho mejor cuando juega por el centro, en el rol que hoy en día (justamente) cubre Wesley Sneijder con mucho éxito, limitando la acción por la banda izquierda del equipo donde Van Bronckhorst tampoco aporta mucho en ataque.
No entiendo por qué Van Marwijk insiste con esta elección si es evidente que está tratando de reemplazar a Robben con un jugador completamente fuera de su rol preferido, teniendo en la banca a talentos como Afellay o Elia, que son precisamente alas naturales, es algo realmente incoherente pues en ambos partidos ha terminado por sustituir a Van der Vaart metiendo justamente a Elia.
Hasta ahora nadie le ha hecho pagar el precio, aunque Okubo hoy le creó bastantes problemas demostrando que es un jugador grandioso por su entrega y su calidad tanto técnica como táctica. Japón no se entregó y buscó inteligentemente la oportunidad de hacer daño, pero la fortuna de Holanda es tenerlo a Wesley Sneijder que no lo piensa dos veces para disparar a puerta, una puerta donde hoy se extrañó sinceramente la experiencia y el liderazgo de Kawaguchi luego del error que dió orígen al único gol del partido.
Para resaltar siempre las subidas de Van der Wiel por derecha que resultan siempre peligrosas porque De Jong le ofrece bastante apoyo, pero como ya dijimos el lado flojo es la izquierda donde Van Bronckhorst queda solo y cuando sube le cuesta más regresar, ofreciendo el espacio para las contras a sus espaldas como se vio en varias ocasiones. También positiva como siempre la versatilidad de Kuyt, aunque hoy no pudo explotar todo su potencial.
Holanda ya tiene las maletas hechas pues está por tomar el tren hacia los octavos de final, pero si el equipo desea apuntar bien alto le hará falta corregir los errores antes que encuentre por el camino a un equipo que los sepa explotar, y seguramente llegará.
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